Este proyecto garantiza que las mujeres que están prestando el servicio militar voluntario puedan acceder a su licencia de maternidad sin perder sus derechos. También les da la posibilidad de retirarse voluntariamente si así lo desean, priorizando su bienestar, su salud y su autonomía durante el embarazo.

La propuesta asegura además que estas mujeres estén cubiertas por el sistema de salud militar y que sus bebés menores de dos años sean beneficiarios. El objetivo es cerrar brechas de género dentro de las Fuerzas Militares y brindar a las gestantes una protección real y respetuosa de sus derechos.